Dios y Padre celestial. Haznos generosos para tú obra, pon en nosotros espíritu de sacrificio y llena nuestro camino de acciones de gracias. Muévenos según nuestros dones. Haz que los pongamos a tus pies, y concédenos, por tu benevolencia, ser habitación de tu misma presencia. En el nombre de Jesús. Amén.