JOB 31

Hoy pedimos al Señor templanza y paciencia para no aventurarnos en nuestras palabras. Es sabio respetar y escuchar primeramente a los mayores, aunque la sabiduría divina no tiene edad.  Pedimos igualmente no adelantarnos juzgando a nadie sabiendo que sólo hay un Juez de todos. También pedimos al Señor que nos haga compasivos, empáticos y misericordiosos abandonando siempre cualquier atisbo de severidad.  Y que la ira no nuble nuestra mente cegándonos el raciocinio, ni el prejuicio nos empodere vaciándonos de toda humanidad.