Salmo 29:2

Tributad al SEÑOR la gloria debida a su nombre; adorad al SEÑOR en la majestad de la santidad. (Sal 29:2)


Oh, Cristo venimos a ti,
Verdadero Hijo de Dios y hombre,
Por quien todas las cosas existen,
En quien toda vida empezó.
Solo en ti vivimos y nos movemos,
Es en tu amor que tenemos nuestro ser.
E.MARGARET CLARCKSON (1915-2008)


Te busco, oh Dios, y anhelo conocerte; porque en conocerte, empiezo a comprenderme a mí mismo. Que mi adoración, hoy, te satisfaga, tal como eres digno. Amén.

Deja un comentario

Este sitio utiliza Akismet para reducir el spam. Conoce cómo se procesan los datos de tus comentarios.