Salmo 119:161-162

161 Príncipes me persiguen sin causa,
pero mi corazón teme tus palabras.
162 Me regocijo en tu palabra,
como quien halla un gran botín. Salmos 119:161-162


El Padre le escucha orar,
Es la oración de su querido Ungido;
Y es que no puede rechazar,
La presencia de Su Hijo.
CHARLES WESLEY (1707-1788)


Te anhelo, Oh Majestad en las alturas, tu bendita presencia me abruma hasta tal punto que solo puedo alabarte en silencio, enmudecido de admiración. Tu preciosa Palabra me deja estupefacto. En el nombre de Jesús. Amén.

 

 

Deja un comentario

Este sitio utiliza Akismet para reducir el spam. Conoce cómo se procesan los datos de tus comentarios.